El libro viejo
Hace ya casi diez años, conocí a Jesús, mi amigo librero. El tenía un stand en un local que quedaba en la Av. Garcilazo, conocida por todos como Av. Wilson.
A mi me gusta pasar mis buenos ratos buscando libros donde Jesús. El te invita a pasar a su stand, no es como muchos de los libreros de Amazonas, que lo primero que te dicen es: "Habla, que buscas".
Jesús conoce bastante de libros, casi ningún tema le es ajeno. Tengo tantos recuerdos sobre todo lo que he podido encontrar en su stand:
- La Divina Loca; biografía novelada sobre Manuelita Saenz
- La Ciudad de la Alegría; novela de Dominique Lapierre
- El Archivo de Odessa; novela de Frederick Forsyth
- Vinoba o la nueva peregrinación; una biografía del maestro hindú en una muy rara edición argentina.
- El Tonel de Diógenes; de Manuel Gonzalez Prada, en su 1ra edición impresa en Méjico.
...y la lista continúa.
Ahora Jesús está en Jirón Quilca, su stand está en una galería ubicada frente al Averno. Yo me puse a pensar, "Jesús frente al Averno"...las cosas que nos permite ver nuestra ciudad capital. En su stand, los libros no están en orden. Corrijo, tienen el orden de un motivante desorden, ya que hace mas atractiva la búsqueda. Uno como que se zambulle en un mar de libros y revistas, tanto en castellano como en inglés.
En otras ocasiones, el motivante desorden, me hace parecer que los libros están como en matorrales, una pequeña montañita por aquí, donde logro distinguir una biografía de Moshe Dayán. Mas allá un matojo de revistas, donde observo una edición de la colombiana Cambio, dedicada enteramente a Gabriel García Marquez.
En mi pesquisa libresca coincido con otros "buscadores", cada uno tiene un tema en particular: Matemáticas, Pintura, Comics, Filosofía. Con algunos de ellos entablo conversa y me voy nutriendo de conocimiento. Llegan también clientes buscando libros diversos como: Cien Formas de Preparar un Huevo; Bijoutería; Napoleón y Talleyrand etc.
Les doy un dato, hay una sección que se llama "De a SOL". Allí encontré joyas como El Olor de la Tierruca de José María Pereda.
Ahora que se está dando impulso a los planes que motivan la lectura, Jesús y su stand, son una buena alternativa para poder hallar libros y a precio justo.
Por ahora, es todo amigo lector.
Ahora Jesús está en Jirón Quilca, su stand está en una galería ubicada frente al Averno. Yo me puse a pensar, "Jesús frente al Averno"...las cosas que nos permite ver nuestra ciudad capital. En su stand, los libros no están en orden. Corrijo, tienen el orden de un motivante desorden, ya que hace mas atractiva la búsqueda. Uno como que se zambulle en un mar de libros y revistas, tanto en castellano como en inglés.
En otras ocasiones, el motivante desorden, me hace parecer que los libros están como en matorrales, una pequeña montañita por aquí, donde logro distinguir una biografía de Moshe Dayán. Mas allá un matojo de revistas, donde observo una edición de la colombiana Cambio, dedicada enteramente a Gabriel García Marquez.
En mi pesquisa libresca coincido con otros "buscadores", cada uno tiene un tema en particular: Matemáticas, Pintura, Comics, Filosofía. Con algunos de ellos entablo conversa y me voy nutriendo de conocimiento. Llegan también clientes buscando libros diversos como: Cien Formas de Preparar un Huevo; Bijoutería; Napoleón y Talleyrand etc.
Les doy un dato, hay una sección que se llama "De a SOL". Allí encontré joyas como El Olor de la Tierruca de José María Pereda.
Ahora que se está dando impulso a los planes que motivan la lectura, Jesús y su stand, son una buena alternativa para poder hallar libros y a precio justo.
Por ahora, es todo amigo lector.
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